Los expertos de Lilium Aviation, un startup patrocinada por la ESA, han concebido un avión de uso personal - la idea es que se utilice en vuelos de recreo diurnos- capaz de despegar y aterrizar de forma vertical. Este biplaza eléctrico alcanzará los 400 km/h y los 3.000 metros de altitud, y si todo va bien, podría estar listo en 2018.
El ingeniero alemán Daniel Wiegand, gerente y cofundador de la companía, explica que el objetivo "es desarrollar una aeronave que cualquiera podría llegar a utilizar en su día a día."
De hecho, aunque en un principio su uso estará acotado a ciertas zonas, sus creadores creen que no requerirá construir instalaciones especiales: podría alzar el vuelo desde cualquier superficie plana y abierta de unos 15 x 15 metros, incluido el patio trasero de cada casa.
Desde la revista "Muy Interesante" Vyara
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